Una escort de lujo revela todo lo que la gente quiere saber sobre la profesión
Tengo aspecto de vecina de al lado. No soy una modelo de esas que te dejan con la boca abierta, pero soy guapa, tengo un buen cuerpo y una piel suave”. Esta es la descripción que hace de sí misma la escort , scort australiana que se oculta bajo el pseudónimo de 'growlergirl', una chica de 25 años que ha decidido publicar en Reddit para resolver las dudas de todos aquellos que desean conocer los entresijos de su profesión. Cuenta esta joven que se inició en el oficio al borde de los 20, cuando empezó a trabajar para un servicio de alto ‘standing’ de la ciudad de Sydney, desplazándose después a otras urbes como Melbourne y Perth. “¿Cuánto cobras por las respuestas?” le dispara uno de los usuarios. “Estas son gratis, cariño. Así que esfuérzate al máximo”. Las escorts cobran por su tiempo.
Los secretos del negocio
¿Cuáles son las mayores inquietudes de la gente respecto a una profesión como la de escort? La sorpresa es mayúscula: nada distinto respecto a lo que se le preguntaría a cualquier otro trabajador: ¿cuántas horas haces?, ¿cómo vas al trabajo? cuánto ganas?
La australiana desvela los precios de sus servicios: “400 euros la primera hora (550 dólares australianos), 750 la segunda (1050 $), y 210 (300 $) las sucesivas”. Como en todos los negocios existen estrategias para optimizar las ganacias, algunas son clásicas: “Quiero animar a mis clientes a reservarme por más de tres horas. Mis tarifas de doce horas son más económicas si las comparas con las de otras escorts”. También hay argucias menos legítimas: “Cuanto más borracho esté un cliente, más tiempo se quedará y más ganarán tanto el local como la trabajadora”. Además del alcohol, no quedan tampoco excluidas otras drogas más duras: “Cuanta más cocaína tomen, más tiempo permanecerán.
La australiana desvela los precios de sus servicios: “400 euros la primera hora (550 dólares australianos), 750 la segunda (1050 $), y 210 (300 $) las sucesivas”. Como en todos los negocios existen estrategias para optimizar las ganacias, algunas son clásicas: “Quiero animar a mis clientes a reservarme por más de tres horas. Mis tarifas de doce horas son más económicas si las comparas con las de otras escorts”. También hay argucias menos legítimas: “Cuanto más borracho esté un cliente, más tiempo se quedará y más ganarán tanto el local como la trabajadora”. Además del alcohol, no quedan tampoco excluidas otras drogas más duras: “Cuanta más cocaína tomen, más tiempo permanecerán.
El perfil de los clientes de las escorts
Ocupación, clase social, estado civil… ¿qué tipo de varones conforman la clientela de una escort scort de lujo? “Principalmente son hombres con profesiones de cuello blanco, de raza caucásica, india, y asiática, de entre 40 y 50 años. Me complace que sea así, este tipo de hombres suelen ser educados y verdaderamente generosos”, confiesa ‘growlergirl’, quien revela que cuando se trata de hombres casados es normal que los encuentros ocurran a primera hora de la mañana, entre las 7 y las 8. Las scorts nos acomodamos, los esperamos, de eso se trata ser escort.
A mí, por ejemplo, cuando me acostaba con mi novio con 18 años me gustaba el sexo anal, pero me daba mucha vergüenza aceptarlo. No sé si es cuestión de edad o si es porque hoy se conversa sin tapujos, pero ya no me preocupa cuánto me gusta el sexo anal. Dicho lo cual, prefiero todavía las relaciones vaginales a las anales”. He salido una vez con un cliente. Craso error. Como regla, no salgo con clientes, aunque no puedo decir que no me sienta tentada Por muy elevadas que sean las tarifas, no todo está permitido. Los límites también existen: “He recibido llamadas de teléfono de hombres que pedían interpretar juegos de rol en los que entrara el factor del incesto, pero siempre las rechazo. Todas las escorts scorts tenemos límites.
A mí, por ejemplo, cuando me acostaba con mi novio con 18 años me gustaba el sexo anal, pero me daba mucha vergüenza aceptarlo. No sé si es cuestión de edad o si es porque hoy se conversa sin tapujos, pero ya no me preocupa cuánto me gusta el sexo anal. Dicho lo cual, prefiero todavía las relaciones vaginales a las anales”. He salido una vez con un cliente. Craso error. Como regla, no salgo con clientes, aunque no puedo decir que no me sienta tentada Por muy elevadas que sean las tarifas, no todo está permitido. Los límites también existen: “He recibido llamadas de teléfono de hombres que pedían interpretar juegos de rol en los que entrara el factor del incesto, pero siempre las rechazo. Todas las escorts scorts tenemos límites.
El día a día de una escort
No todo es trabajo en la vida de estas mujeres. No obstante, se suele pensar que semejante ocupación debe de condicionar sobremanera la vida privada y afectiva. “Tengo un 90% de matches en Tinder” confiesa ‘growlergirl’, que como muchas otras mujeres utilizan esta app de citas para conocer gente nueva. ¿Interfiere el trabajo en su vida emotiva? “He salido una vez con un cliente. Craso error. Era una maníaca en aquella época. Lo dejé porque siempre estaba cancelando planes en el último minuto. Con todo, ‘growlergirl’ ve la profesión de escort scort como una ocupación temporal: “Planeo mi retirada para el mes de junio de este año, cuando me trasladaré al otro lado del charco para estudiar mi máster”. Eso sí, a pesar de no tener pelos en la lengua para hablar sobre el lado más oculto de su trabajo, no todos los aspectos privados pueden ser desvelados y guarda para sí a qué dedica su vida académica.